Decimos que un gobierno, el que sea, no es bueno ni malo; por el contrario gobierna con aciertos y errores.
Afirmación que echa por tierra cualquier por lo menos rivalidad. Obviamente que esos aciertos deben llegar a todos porque si no se gobierna para unos pocos.
En los últimos siglos cual vetusto criterio dos teorías gemelas que decían enfrentarse –decían porque en última instancia siempre un minoría ilustrada o no- se quedaba con la mejor porción de la torta quedando relegados los más.
Sin embargo a fuerza de no poder explicar algo, lo elemental, con una mirada moderna fueron el marxismo y el liberalismo perdiendo terreno siendo ocupado por otros criterios que proponen la llegada de posibles soluciones que beneficien al conjunto.
Este es el caso de las teorías ambientalistas cuyo fortalecimiento fue posible debido a los desaguisados que comete algunos integrantes desde el poder.
Así nació el proyecto de Reciclar, Reducir y reutilizar todo aquello que sea posible.
Leemos en la página oficial del gobierno porteño:
La puesta en funcionamiento del Centro de Reciclaje de Villa Soldati con sus diferentes plantas tiene varias ventajas:
- El primer beneficio para la Ciudad, es el mayor control sobre la disposición de los residuos: no se descargan de forma ilegal y tienen un correcto tratamiento.
- El segundo es económico ya que el tratamiento de los residuos es mucho más barato que el relleno sanitario.
- Además, permite la reutilización de elementos que tienen valor, como la poda, los materiales de construcción, botellas y orgánicos.
- La reducción del impacto ambiental (huella de carbono) por la puesta en funcionamiento del centro equivale a la plantación de 200 hectáreas de árboles.
- Y contribuye al cumplimiento de la Ley de Basura Cero.
Afirmación que se inicia con estos conceptos:
Hasta el año 2013, Buenos Aires enviaba a relleno todos los residuos que se generaban, cuando no se disponían ilegalmente. En marzo de ese año comenzó a funcionar el Centro de Reciclaje de Villa Soldati, en principio con su planta de áridos (residuos de la construcción). Desde entonces su capacidad fue ampliada y hoy ya suma otras tres plantas, poda, orgánicos y plásticos PET, que le permiten procesar 2.500 toneladas diarias de residuos, unas 600.000 por año.
Este año, el Centro incorporó otra planta llamada MRF, por sus siglas en inglés "Material Recovery Facility", el primer centro verde automatizado de la Ciudad, que permite procesar todo el material seco que viene de las campanas o Puntos Verdes, y hacer una separación automática de papeles, cartones, metales, vidrios y metales no ferrosos.
La ventaja del MRF es que tiene una mayor eficiencia en la separación y una productividad muchísimo más grande que un Centro Verde: permite tratar unas 10 toneladas/hora, cuando en los Centros Verdes es de 20 a 30 toneladas por día.
Ubicado en el barrio de Villa Soldati también significa integrar este barrio a la ciudad y sus necesidades. Olvidado por décadas Villa Soldati y adyacencias parecía pewrtenecer a una ciudad de segundo orden: con dificultades de traslado hacia el microcentro y /o desconectado de otras zonas con escasos medios de comunicación.
Poco a poco la ciudad va diferenciándose con más subterráneos, con más posibilidades en términos generales. Mucho es lo que falta, quién puede dudarlo, lo importante y rescatable es que ya se ha puesto en marcha el territorio porteño.
hola; mi nombre es carmona amelia ,soy docente y estaria interesada en ir con mis alumnos de 3 año a visitar la planta.queria saber que fechas tienen disponibles. Espero su contestacion desde ya muchas gracias.
Estimada docente: El trámite que solicita indefectiblemente debe hacerlo en la comuna que corresponde su barrio. Lamentablemente, escapa a nuestras posibilidades. Gracias, de todos modos, or comunicarse con nosotros.