Acercate al taller a las 14 hs en el centro integral de la Mujer 13 y comuna 13 invita al taller sobre vínculos sanos y herramientas para salir del circulo de la violencia. Av, Cabildo 3067.
Esta fecha, establecida por la ONU en 1999, conmemora el brutal asesinato de las hermanas Mirabal en 1960 en República Dominicana, símbolo de resistencia frente a la dictadura. Más que un recordatorio, es un grito por la justicia y la igualdad que aún está lejos de alcanzarse.
En Argentina, las cifras son alarmantes. Según el Observatorio «Ahora Que Sí Nos Ven», en 2023 se registraron más de 250 femicidios, lo que equivale a una mujer asesinada cada 35 horas. Estos números exponen una realidad que no distingue edades, clases sociales ni regiones: la violencia de género es estructural y necesita un abordaje urgente y multifacético.
Transformar esta realidad exige compromiso colectivo. Para empezar, es fundamental reconocer las múltiples formas de violencia: física, psicológica, económica, sexual y simbólica. También, fomentar una educación con perspectiva de género en todos los niveles educativos es clave para deconstruir los roles y estereotipos que perpetúan la desigualdad. Asimismo, se deben garantizar políticas públicas efectivas, como refugios para víctimas, asistencia legal gratuita y programas de reinserción laboral.
En la Ciudad de Buenos Aires, las mujeres en situación de violencia pueden llamar al 144, una línea gratuita, confidencial y disponible las 24 horas. Además, existen refugios y programas de contención como el Centro Integral de la Mujer y la Oficina de Violencia Doméstica de la Corte Suprema.
¿Cómo podemos participar activamente? Denunciando y acompañando a las víctimas sin juzgarlas, participando en marchas, talleres y campañas de concientización, y exigiendo a las autoridades el cumplimiento efectivo de las leyes como la Ley 26.485 de Protección Integral contra la Violencia de Género.
Este 25 de noviembre no puede ser solo una fecha más en el calendario. Es una invitación a actuar, cuestionar y transformar. Erradicar la violencia contra las mujeres es responsabilidad de todas y todos. Como sociedad, tenemos el poder de cambiar la historia. ¡Que no haya más nombres en las listas de víctimas!