Alejandro Novas nos cuenta su experiencia en la Quebrada de la Luna en Capilla del Monte.
Al abrir los ojos al finalizar la meditación vimos que se acercaba en el cielo estrellado una luz que se iba agrandando cada vez que estaba más cerca , hasta que se posó sobre nuestras cabezas y vimos un anillo grande como una cancha de fútbol que de los bordes salían pequeñas luces en forma de esfera yendo de un lado a otro formando figuras y símbolos.
Hacia una temperatura de cero grados , mientras que dicha nave estaba sobre nosotros nos desprendemos las camperas por el calor de la radiación de dicha nave .
Después de hacer el saludo cósmico (mano derecha en el corazón y mano izquierda levantada), la nave se aleja con las esferas entrando y saliendo de la nave.
Cuando ya no se visualizaba decidimos volver al campamento , que antes de llegar se cruzó por encima de nuestras cabezas otra nave en forma de triángulo hacia Capilla del Monte, y cuando llegamos a las carpas , una luz roja nos hizo varios guiños y se alejó perdiéndose en el firmamento.
Céntimos una gran emoción y alegría, en realidad es inexplicable de lo que se siente, por mi parte no dejaba de dar las gracias por semejante espectáculo , fue un regalo de nuestros hermanos cósmicos.