Nos llegaron denuncias de algunos vecinos con expreso pedido de reserva de identidad que nos alertan sobre la oferta de sexo en Parque Los Andes en horas nocturnas.
Mencionan que en algunos casos son adolescentes y menores también llevando a preguntar si vienen solas o cuentan con alguna “protección” porque en ese caso, estaríamos ante trata de personas entre otras particularidades.
Desde estas páginas nos preguntamos quién o quienes se ocuparán sobre este tema. No sea cosa que como con los camiones estacionados en Forest y Teodoro García debimos ser nosotros los que se encargamos de solucionar este problema.
Lamentablemente estamos ante una dirigencia, de un lado y del otro, que acuerda cargos sin la menor intención de respetar la participación vecinal (que también es decidir) y que comete el desliz de elegir algunos comuneros que jamás pisaron una baldosa en nuestra zona o que no tienen historia barrial.
Esta afirmación lo demuestra que enla Comuna1 los mismos electos dijeron que entre ellos no se conocían: a confesión de partes, relevo de pruebas.
Si hubieran trabajado por el barrio seguro que se hubieran conocido aunque sea de vista pero, lamentablemente, como en aquellos tiempos de la primera década infame (la segunda corresponde desde los años 90 hasta el 2003), se priorizó el acuerdismo, la rosca y la trenza de una dirigencia sin ideas y proyectos.
Así empieza muy mal el tema de las comunas cuando algunos electos se destacan por su falta de trabajo barrial y cuando “por arriba” se decide aquello que debemos decidir nosotros los vecinos.
¿No es que aplaudían cuando Jordi Borja decía que “todo aquello que se puede decidir en niveles inferiores no debe hacérselo en los superiores”?
Mejor que decir es hacer, mejor que prometer realizar… No lo olviden…