Y Gabo se fue al cielo… despedida para no despedirte

La noticia corrió como un murmullo…queríamos negar tu muerte, así de golpe tan seguidos los adioses de los más queridos…cacheteados de bronca e impotencia…sabemos que sí, que era cierto…que estuviste enfermo y tu cortesía, no quiso avisarnos que tenías el pasaje en la mano…Recorrimos junto a la incredulidad la tristeza de no tenerte ni verte parado en un espacio que siempre quedaba chico para tu figura mística, tus versos que sonaban en esa voz  de impecable, riguroso fraseo, o con un tono de guerrero náhuatl, en medio del silencio  expectante…

Hoy podemos decirte, que justo ahora que  todo parece perderse, hoy que estamos más necesitados, hambreados de  verdad y poesía hoy justamente ahora entras a una distancia mística y cercana, si habremos comprendido  tus letras  que contenían letras…como una carta escrita sobre otra,  y el laberinto nos dejaba  aberturas para jugar a irnos..

Del movimiento Punk en los 90, convertido en solista desde el 2005, andando rutas y caminos con músicos que como vos, buscaban tocar al otro de manera sutil y rotunda.  Voz y poesía, con Luciana Jury Pablo Ramos, Flopa, Y allí la misa rea  la música urbana, el rock, poesía, psicoanálisis…el teatro…. el deseo. El ser. Los fantasmas, lo onírico…Trabajo como nadie a A. Artaud, confundiéndose entre palabras que decían ayer, y vos decías también, enfundado en tus jeans.

Lo disfrutamos como actor, protagonizando una obra de Arlt: El astrologo… Nada te era indiferente y ponía el cuerpo, la voz, la vida en cada entrega al otro, su otra parte.

Este Gabo Farro, fascinante, un juglar de ojos traslucidos y mirada profunda, este  Gabo Farro, nos mostró como nadie la tristeza, casi como piel que había mimetizado en su obra. El Gabo que nos ganó el alma mitológico fauno, sol él y su voz i, solo el, su guitarra y nosotros que lo amábamos.

Su fraseo, sus tonos…de rito, de avalancha… eso es, eso sos. Nos deja una obra monumental…su diversidad  es hoy el Tarot de Osho, su mirada en Jorodowsky…

En 2005, Canciones que un hombre no debería cantar…

Casi un disco por año, le llevaba preparar sus materiales, desde la tapa de  disco, a la elección del tema que resonara en su alma en ese momento de tirar  al viento su decir que  quedaba grabado en cada uno que aceptaba su mística… a la cual se entregaba.

Tanto y todo lo que resumía Gabo era inolvidable…único,

En 2013, Nos da  La primera noche del fantasma. Buscaba alguien que lo definiera para la tapa de ese disco, y fue Marcia Swartz.

Decía: Mi vida es un tango,  filosofaba sobre el porqué de las cosas, los objetos, uno se pasa coleccionando elementos que nos darán felicidad, pensamos, y no es así… Y si, cada vez, cada ruptura equivale a un terremoto, habla la furia saltando sobre la tristeza. Depresión y desgano… «Solo tenemos ciencia para tanto dolor…» salmodiaba Gabo, un ser desnudo ante su público, despojado de Yoes.

Cultivaba su obra, la hacía un jardín de expresiones, multiplicidad de virtudes acudían a su obra y las gozábamos.

Y hablaba de su sexualidad, sus canciones de amor y el después… En «Costurera Carpintero» una obra que se resinifica trans, luego de años cantada y sentida.

Los hombres crueles lo enfurecían… y así lo cantaba y vivía.

En 2007,  con «El cuadro de mi daño» vemos…»cualquiera no es tela de nadie. Hay hombres para ser hombres nomas, y hay hombres para ser arte». «Corona de Caranchos»… ojos al cielo, dice. Me entrego descalzo».

En todo, hablarle al otro, con canciones urgentes, como rayo.

 

Cuando canto no estoy… Quiero tener poco que ver con lo que le pasa a la gente. Me corro.  La carta del amor y la muerte. La carta de su tiempo. Amar tener, partir.

«Donde veas mi cuerpo, nunca estaré.  Donde suene mi voz,  ahí es donde estaré…

Saludamos, te saludamos…como todo lo que fuiste y nos dejaste ver… solo hasta allí, con vos se  van los juglares y los unicornios que te acompañaron a lo largo de tus 45 años, que en carrera siguen galopando a la casa galáctica que espera tu regreso.  Y su Recetario panorámico, elemental, fantástico y neumático (2015), nos espera para que sin quererlo te encontremos de nuevo…

Desde un extrañamiento que comienza, te damos este abrazo Gabo Farro. Un ser de dimensiones vastas como el campo, los caballos y el alma de los hombres buenos…