Que los argentinos bajamos de los barcos es una verdad a medias; valedera, sí, para algunos lugares o territorios (Ciudad Autónoma de Buenos Aires, el Estado Provincial, Córdoba, Rosario, Provincia de Santa Fe, etc), el resto o la Argentina profunda más podría tener que ver con los pueblos originarios y con los países vecinos que anteriormente conformábamos el virreinato del Río de la Plata (Bolivia y Paraguay)o del Virreinato del Perú.
Por lo tanto es una expresión en algún punto discriminatoria o un argumento discriminatorio en ciertos aspectos. Hecha esta aclaración, sería interesante desmenuzarla en su contenido.
¿Cómo y quienes bajaron los barcos? ¿Han venido por propia voluntad o porque fueron traídos por la fuerza, cazados en sus lugares de origen, esclavizados en las peores condiciones y venidos a suplantar a la mano de obra esclava de los dueños de la tierra que no soportaban las largas jornadas de trabajo a que eran sometidos por la conquista española del Plata?
La historia de la Ciudad es una larga novela de mentiras, de argumentos falaces, de manipuliadados argumentos y de antojadizas opiniones que pretenden y pretendieron hacer pasar por válidos hechos que no ocurrieron.
La historia de la Ciudad de Buenos Aires es una intensa gama de mentiras propagadas por la generación del ochenta del Siglo XIX cuyos integrantes se sintieron “europeos obligados a vivir en América”, quienes no obstante eso también bajaron de los barcos (ellos o sus ascendientes)
No obstante eso debemos decir que luego del genocidio español en el Río de la Plata con la conquista producida en 1492 (que no fue el encuentro entre dos culturas como les gusta decir) sino directamente el asesinato en masa de los pueblos nativos y de los africanos traídos por la fuerza de algunas naciones europeas conocidos por la barcos negreros.
Hecha esta mecesaria aclaración en esta misma historia debemos citar zonas de la Ciudad de Buenos Aires con un contenido nítido de los africanos esclavizados: Parque Lezama o del Retiro de franceses e ingleses respectivamente que eran lugares de acopiamiento y de ventas de mano de obra africana; el barrio del Mondongo en la actual Comuna 4, llamada así porque eran arrojados los desperdicios y los afros corrían a buscar porque nada les era cobrados (algo similar que es lo que ocurre hoy día en el Mercado Central y que también no es del dominio público cuando los que menos tienen recogen de la basura su alimento)
En tres o cuatro notas intentaremos diferenciar las mentiras de la historia de cartlina berreta que nos fue contada por quienes mintieron y mienten alevosamente a nuestros niños en las escuelas primarias.
Hemos decido separar así el tema que nos ocupa no sólo por la importancia sino por la extensión y por un debido reconocimiento a Senagaleces, cabo verdianos, cameruneces, etc., cuyos integrantes aún hoy siguen siendo discriminados en la Ciudad de Buenos Aires pero ocultados muchos de sus hechos en beneficio incluso, de la "independencia" sirviendo de carne de cañón o en las contiendas entre caudillos o en la guerra de la Triple Infamia contra el hermano pueblo paraguayo seguidor del Maiscal Solano López, allá por el Siglo XIX.